Lenze

El robot MiR200 mejora la ergonomía de la estación de embalaje de paquetes pequeños de Lenze

El MiR200 de Lenze Drive Systems en Ruitz (Francia) está equipado con un transportador motorizado sincronizado con un sistema automatizado formado por varias estaciones motorizadas de entrega y recogida. Para mejorar la ergonomía al mismo tiempo que la productividad de esta estación, la empresa decidió integrar el robot móvil colaborativo MiR200 para encargarse del transporte de los productos acabados entre la estación de embalaje y la estación de almacenamiento antes de su envío.

Problema y solución

Lenze es uno de los líderes mundiales en automatización en el campo de la fabricación de maquinaria, especializado en automatización centrada en el movimiento. Esta empresa familiar, fundada en 1947 en Alemania, cuenta con 3.700 empleados en más de 60 países de todo el mundo. Lenze trabaja para y con sus clientes para crear productos y paquetes mecatrónicos innovadores, sistemas de alto rendimiento compuestos de hardware y software para la automatización de máquinas, así como servicios de digitalización.

En Francia, el grupo Lenze tiene dos filiales y emplea a 180 personas. Creada en 2004, la planta de Ruitz, en Hauts de France, es un "escaparate de la industria del futuro". Actualmente cuenta con 130 empleados y produce convertidores de frecuencia y motorreductores. Este centro también incluye una plataforma logística para entregar estos aparatos en toda la costa atlántica de Europa y en el Magreb.

Fue para su puesto de embalaje de pequeños paquetes donde Lenze detectó la necesidad de mejorar la ergonomía. En efecto, el puesto implicaba muchos desplazamientos y el transporte repetido de paquetes, con movimientos que podían provocar TME (trastornos musculoesqueléticos). En total, se trataba de unos 100 paquetes por operario y día.

Para mejorar la ergonomía al mismo tiempo que la productividad de esta estación, la empresa decidió integrar un robot móvil colaborativo MiR200 para encargarse del transporte de los productos acabados entre la estación de embalaje y la estación de almacenamiento frontal antes de su envío. El robot tenía que ser capaz de recorrer de forma autónoma casi 5 km al día, o unos 100 km al mes. Olivier Regnier, Director de Logística de Lenze, explica: "El operario tenía que coger la caja de cada paquete y transportarla para colocarla en un palé junto al puesto. Nuestro objetivo era simplificar su trabajo: al encargarse del transporte de los paquetes, el robot móvil permite al operario no perder más tiempo dejando su puesto".

La elección recayó en un AMR MiR200, equipado con un transportador motorizado. Para este proyecto, Lenze trabajó con el integrador CJL Pack y el distribuidor HMI-MBS. La implantación de la solución duró un año, desde el inicio de la redacción del pliego de condiciones hasta la puesta en servicio de la instalación.

Una elección guiada por la sencillez y la seguridad

Lenze optó por la solución MiR por la sencillez de implementación del robot móvil, incluido el modo de aprendizaje del entorno de la máquina. A diferencia de los AGV convencionales, el robot móvil no se limita a seguir una ruta predefinida de antemano. Se adapta en tiempo real al entorno inmediato.

Con sensores y cámara 3D incorporados, el MiR200 es capaz de identificar su entorno y tomar la ruta más eficiente hacia su destino, sorteando cuidadosamente los obstáculos y las personas que se encuentren en el lugar. El robot sólo necesita un punto de partida y un punto de llegada, y calcula una nueva ruta basándose en la configuración inmediata de la fábrica.

Hemos observado una mejora de la productividad en los puestos afectados de entre un 10 y un 15%. Esto se debe al hecho de que el robot elimina muchos desplazamientos innecesarios para los operarios y también limita los puertos de carga de unos 2000 kg al día

Olivier Regnier

Director de logística de Lenze

Funcionamiento sencillo para beneficios inmediatos

El MiR200 está equipado con un transportador motorizado, sincronizado con un sistema automatizado que consta de varias estaciones motorizadas de entrega y recogida.

En cuanto una caja está embalada y lista, el robot recibe información y se dirige a la estación de embalaje. El sistema determina el tamaño de la caja y el transportador motorizado la carga en el robot. A continuación, el robot se desplaza al punto de entrega y, en cuanto está en posición, se activa el transportador: la caja se coloca en una estación donde se consolidan las cajas antes de su envío.

El ciclo completo, que incluye el movimiento, el análisis de la caja, la entrada de la caja y el transporte, dura entre 2 y 4 minutos.
El MiR200 funciona continuamente en turnos de 2x8 horas, entre las 6 de la mañana y las 9 de la noche, y recorre una media de 5 km al día.

En cuanto a la gestión de la batería, la instalación se ha programado para que el robot se dirija de forma autónoma a su estación de carga en cuanto el nivel de la batería descienda por debajo del 30%. Además, Lenze aprovecha los tiempos de descanso para recargar el robot, de modo que esté disponible de forma continua entre las 6 de la mañana y las 9 de la noche siempre que se le solicite, sin tener que preocuparse de cambiar la batería.

Lenze pudo observar rápidamente las ventajas. "Hemos observado una mejora de la productividad en los puestos afectados de alrededor del 10 al 15%. Esto se debe a que el robot elimina muchos desplazamientos innecesarios para los operarios y también limita los puertos de carga de unos 2.000 kg al día", subraya Olivier Regnier, Director de Logística de Lenze.

El robot también fue muy bien aceptado por los empleados. "Ya disponíamos de robots autónomos de tipo AGV in situ. Además, la fiabilidad de funcionamiento del robot MiR, y más ampliamente de la instalación, hizo que la aceptación del robot fuera muy fácil. Los operarios recibieron formación básica sobre el uso del robot. Esto es más que suficiente para permitirles hacer frente a los pocos retos que se les presentan a veces"

Por tanto, la convivencia entre humanos y robots se produjo de forma natural, mientras que la zona de trabajo del robot es también un lugar de paso habitual para las personas.
Lenze está estudiando otras aplicaciones del robot, en particular para ampliar el radio de acción de la instalación actual.